grabados rupestres

donde se unen la tierra y el cielo

donde se unen la tierra y el cielo
En La Palma, la arqueología y la astronomía han cruzado las miradas, unos al suelo y otros al cielo, para coincidir en una misma dirección, interrelacionando las observaciones hasta confirmar la importancia de los atros entre los antiguos habitantes de Benawara.
“adoraban al Sol, la Luna y otros planetas” (Alvise Ca’da Mosto, 1455-1457)

"Quienes tratan de interpretar símbolos en sí mismos miran la fuente de luz y dicen:"no veo nada". Pero la fuente de luz está ahí no para que se la mire a ella, sino para que se mire y vea lo que ella ilumina. E igual pasa con el simbolismo" (Dan Sperber).





domingo, 20 de julio de 2008

caracteres líbicos de Tajodeque

Se trata de un yacimiento prehistórico de primera magnitud que se encuentra a 2.100 m de altitud, en la base de un roque de lava y toba volcánica, en la cara interna de la Caldera de Taburiente. Las inscripciones o paneles son 4 y se localizan sobre la cornisa y en el interior de una cueva. La propia caverna tiene una disposición que mira hacia el este/sureste, justo al lugar por donde asoma el Sol del amanecer del solsticio de verano, por detras de los picachos del Espigón Atravesado.
El panel exterior lo conforman unos 16 motivos silábicos, acompañados de otros 6 símbolos geométricos en forma de círculos, círculos concéntricos, reticulares y espirales.
Nada más entrar en la cavidad, encontramos el siguiente panel formado por 9 caracteres. Los paneles 3 y 4 se ubican en la pared del fondo, conformados por 5 y 6 caracteres.
En total son 15 caracteres diferentes representados 35 veces de la siguiente manera:
Si alguna vez durmieran en la cueva para ver uno de los amaneceres en torno al 21 de junio podrán experimentar una sensación indescriptible cuando el Sol del verano aparece en frente de tí y el panel exterior comienza a iluminarse, poco a poco, de arriba a abajo. Si lo hacemos sobre el 21 de diciembre, el amanecer se produce por detrás de la isla de Tenerife, situada en medio del hueco que deja la degollada de La Madera, entre los impresionantes riscos de la Caldera. En este momento, de una manera asombrosa, se iluminan los dos paneles que se encuentran en el fondo de la cavidad.