grabados rupestres

donde se unen la tierra y el cielo

donde se unen la tierra y el cielo
En La Palma, la arqueología y la astronomía han cruzado las miradas, unos al suelo y otros al cielo, para coincidir en una misma dirección, interrelacionando las observaciones hasta confirmar la importancia de los atros entre los antiguos habitantes de Benawara.
“adoraban al Sol, la Luna y otros planetas” (Alvise Ca’da Mosto, 1455-1457)

"Quienes tratan de interpretar símbolos en sí mismos miran la fuente de luz y dicen:"no veo nada". Pero la fuente de luz está ahí no para que se la mire a ella, sino para que se mire y vea lo que ella ilumina. E igual pasa con el simbolismo" (Dan Sperber).





jueves, 29 de mayo de 2008

El cielo representado en los grabados rupestres

Según Federico González, que ha estudiado las relaciones cósmicas de las culturas precolombinas americanas, para las sociedades tradicionales y primitivas el símbolo constituye (y toda expresión o manifestación, ya sea macro o microcósmica, es simbólica) una señal real que se produce dentro de un conjunto de caracteres igualmente vivos que se entrelazan y relacionan entre sí a través de la pluralidad de sus significados, conformando un lenguaje o código cifrado propio y revelador con el que además cohesionan a la comunidad en que se manifiestan. Esto se debe a que tanto el símbolo como el mito o el rito son el puente entre una realidad sensible, perceptible y cognoscible a simple vista y el misterio de su auténtica y oculta naturaleza que es su origen.
Los pueblos arcaicos y tradicionales han utilizado fundamentalmente al símbolo como forma de comunicación, lo que establece una perpetua relación entre el propio signo y la cosa simbolizada. Todos sus conocimientos se expresan simbólicamente porque sus símbolos sagrados manifiestan, de modo real y verdadero, las energías que ellos representan y de las que son mediadores. El símbolo es mágico en virtud de la analogía que lo liga indestructiblemente (y lo identifica) con aquello que está simbolizando. Entre estos símbolos son de extraordinaria importancia mágica y sagrada las figuras geométricas, que toda sociedad arcaica ha conocido y con los que ha simbolizado el cosmos. Para las culturas canarias ancestrales este rito universal es ejemplificado en la bóveda celeste por el Sol, la Luna y otros planetas y estrellas, así como por sus ciclos de aparición y desaparición, muerte y resurrección, de los que la tierra y el ser humano dependen, ya que han visto en ellos la manifestación más alta de los modelos o arquetipos universales y eternos en los que fundamentaron su cosmogonía.
Representaciones simbólicas de la forma cósmica aún son actuales en distintos ritos, ceremonias y concepciones, y se hallan en perfecta correspondencia con otras cosmogonías, vivas y muertas, que sintetizaron con estos símbolos su filosofía y visión del mundo. Las diferentes formas geométricas que salpican la geografía insular de la isla de La Palma son símbolos de ascenso y un medio de comunicación con el cielo. Representan un todo continuo, sin principio ni fin.
En pocas sociedades tradicionales es tan notoria la obsesión de simbolizar y agrupar todas las ideas fundamentales de su religión, consistente en agrupar a todos los seres según los puntos solsticiales y/o de abajo arriba. Un grabado rupestre es una forma sagrada como lo es el cosmos.

No hay comentarios: